En El Puerto de Santa María tenemos una plaza de toros con capacidad para 15000 personas que unicamente se llena cuando hay regalo masivo de entradas (vease la corrida de Jesulín para las mujeres y eventos similares). Incluso se cuenta que el antepenúltimo alcalde repartía un taco de entradas cada vez que había toros, en definitiva, tratándose de un área metropolitana de de 400000 habitantes más todos lo que vienen en verano el que no se llene la plaza salvo que regalen las entradas demuestra que aunque sigue existiendo interés por las corridas de toros la gente no está dispuesta a pagar lo que vale la entrada. El fin de las corridas de toros no lo obtendremos con su prohibición sino que llegará por el tema económico, una vez que supongan pérdidas grandes que nadie esté dispuesto a asumir y una plaza vacía se acabarán en poco tiempo, y entonces lo rematarán con una prohibición oportunista. Esto ya ha ocurrido, en canarias las corridas de toros fueron prohibidas tras haber perdido la rentabilidad con la retirada de El Cordobés, en Cataluña en cosa de año y medio o dos acabará pasando lo mismo.
El Toro tiene mucho futuro, las corridas poco futuro, aunque los carteles de cancelado son una forma de llamar atención es posible que ese día no quede tan lejos...
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